Las parejitas
Entré en el metro y Sabina iba cantando en mi mp3, no recuerdo bien que, pero alguna canción de desamor. Como siempre me quedé apoyado contra las puertas del lado contrario a las que se abren. Y delante mío quedaron dos parejas, sentadas dándome la espalda. Los de la izquierda vestían de riguroso negro pero a la moda, viajaban juntos pero ni se miraban. A su lado otra pareja, ella de lila en blusa, zapatos, medias y anorak. Él de naranja en el jersey y calcetines. ¿Donde encuentran calcetines naranjas? Ella se levantó del asiento, sin dejar de mirarle en ningún momento mientras se ponía el anorak. Una vez lo tuvo puesto, le besó y se dirigió a la puerta. Mientras ella esperaba que el metro parara e intentaba guardar el equilibrio, el la miró de reojo, sin que ella le viera, no fuera a tener problemas para bajar. El metro paro, ella bajó mientras él empezó a buscar algo en su chaqueta, caminaba por fuera del vagón se paró y le busco dentro, y se quedó allí de pie sin que la viera. Por ese sexto sentido que todos tenemos levantó la cabeza de su chaqueta y la vio allí detrás del cristal, como le sonreía y le decía adiós con la mano. Llegamos a la siguiente parada, el chico de naranja se le levanta y se dirige a la puerta. El chico de negro, por primera vez la mira a ella, le toca el brazo y le dice "vamos es aquí", y se bajan. Sabina sigue cantando, y inevitablemente sus recuerdos me invaden, y ya no soy capaz de recordar que cojones cantaba Sabina.
Que cosas éstas del amor eh Jordi?? Me imagino como te sentiste, me he sentido así alguna vez, los recuerdos vienen sin avisar, invaden cada célula a su paso y se van dejándonos como si un camión nos hubiera pasado por encima.
ResponderEliminarPero no hemos de preocuparnos, pensemos que el 2010 será nuestro año.
Un beso cargado de cariño
amm bueno que observacion...vaya!
ResponderEliminaryo tengo mucha memoria... y de un rostro jamas me olvido...
besines jor!
:)sau