Speedy y yo
Hola,
Llega el parón navideño y los niños dejan de ir al cole y le dan las notas. Así que a Leyre le han dado las suyas, que simplemente son calificaciones de cosas como compartir, organizar, recordar,.... según los entendidos en el tema, han acertado incluso en lo de mandona y que no le hace mucha gracia compartir, pero también están de acuerdo en que ella y yo tenemos bastantes cosas en común. Aunque también tenemos cosas totalmente opuestas, ella es Speedy González y yo su amigo Slowpoke.
Las leyes de la genética ya dejan claro que ella no puede haber heredado nada mio, y por supuesto como yo nací antes, nada de ella puedo heredar yo. La rama que tenemos en común es la familia Gil Ximénez, así que algún antepasado de mis padres, sus abuelos maternos, tuvo que parecerse mucho a nosotros dos.
Mientras investigamos el árbol genealógico familiar, pasamos las tardes con lo que ella llama "chichir contes". Simplemente cogemos cuentos, libros de colorear, publi de juguetes y pasamos hojas, pero el otro día se puso profunda y empezó a hablarme de su futura hermana. Cosas como cuanto la va a querer, como la cuidará, donde se sentará en el coche y que ya no cabrá nadie mas,... razonamientos profundos para un moco de tres años. Yo le seguía la conversación, para que la alargara lo mas posible, ya que podías oir su cerebro pensar lo que decía, pero me quedó claro que sí, que algo parecida a mi tiene.
Llega el parón navideño y los niños dejan de ir al cole y le dan las notas. Así que a Leyre le han dado las suyas, que simplemente son calificaciones de cosas como compartir, organizar, recordar,.... según los entendidos en el tema, han acertado incluso en lo de mandona y que no le hace mucha gracia compartir, pero también están de acuerdo en que ella y yo tenemos bastantes cosas en común. Aunque también tenemos cosas totalmente opuestas, ella es Speedy González y yo su amigo Slowpoke.
Las leyes de la genética ya dejan claro que ella no puede haber heredado nada mio, y por supuesto como yo nací antes, nada de ella puedo heredar yo. La rama que tenemos en común es la familia Gil Ximénez, así que algún antepasado de mis padres, sus abuelos maternos, tuvo que parecerse mucho a nosotros dos.
Mientras investigamos el árbol genealógico familiar, pasamos las tardes con lo que ella llama "chichir contes". Simplemente cogemos cuentos, libros de colorear, publi de juguetes y pasamos hojas, pero el otro día se puso profunda y empezó a hablarme de su futura hermana. Cosas como cuanto la va a querer, como la cuidará, donde se sentará en el coche y que ya no cabrá nadie mas,... razonamientos profundos para un moco de tres años. Yo le seguía la conversación, para que la alargara lo mas posible, ya que podías oir su cerebro pensar lo que decía, pero me quedó claro que sí, que algo parecida a mi tiene.
Comentarios
Publicar un comentario