¿el trabajo del futuro?
Hola,
Llevo ya un tiempo siguiendo a unos cuantos youtubers.Sí, estos chavales que se graban delante de una cámara, tienen millones de visitas e incluso algunos se ganan bien la vida con ello. Y sí, he decidido poner chavales porque aún no he encontrado a nadie mas viejo que yo vloggeando, y seguro que alguno ha de haber.
De tipos de youtubers hay de todo, como en botica, pero el funcionamiento básico de lo que hacen todos es bastante común. Uno tiene algo que explicar, un hobby, una habilidad, una idea, planifica lo que va a decir, lo graba en cualquier lugar y lo sube a YouTube. Le dan clic al botón de monetizar el vídeo y por cada cierto número de visionados reciben cierto dinero. Vamos que a todas luces es un trabajo. Hay una buena parte de ellos que os dirán que lo hacer por hobby, que no es un trabajo, pero eso es porque no reciben el suficiente dinero como para dedicarse exclusivamente a eso, pero en cualquiera de los casos son personas totalmente autónomas. Autónomas en los dos sentidos de la palabra, que ellos se lo guisan y se lo comen, y que es su tipo de régimen laboral. Raro es el que trabaja por cuenta ajena.
No suelo interactuar con ellos pero el otro día una booktuber (alguien que hace vídeos hablando de libros) decidió que la gente le podíamos preguntar lo que quisiéramos, que contestaría, y lo hice. La pregunta era de aquellas con semilla de respuesta, puesto que ya sabía que me respondería. Le pregunté cuantos libros lee por semana para poder hacer un vídeo cada semana. La respuesta fue uno cada tres días aproximadamente, que lee a todas horas. A mi me duran meses, así que a mi no me cundiría, pero a parte de que soy lento leyendo, ¿veis a donde quiero llegar?
Tomando como ejemplo esta buena mujer que lee libros, se ve obligada a un cierto ritmo de lectura, para poder hacer un vídeo cada cierto tiempo, para poder ganar dinero por ello. Si un día no lee, no hay vídeo, luego no hay dinero. Se ha vuelto esclava de si misma. No se cual es la realidad de su caso, quizá su fuente de ingresos es otra, pero podéis aplicar este esquema cualquier youtuber que conozcáis. Desde los que viven de jugar a vídeo-juegos, a los que cantan, a los que gastan bromas, a los que hablan de cine, filosofía, ciencia, misterio, punto de cruz, manualidades, incluso esos niños que solo se dedican a jugar y que tienen a mi sobrina grande enganchada. Aunque también está enganchada a Ricky Martin.
A lo que iba, cuando nos vendieron que el futuro era el trabajar desde casa, la deslocalización, la flexibilidad de horarios, no era esto. Se trataba de que si tenías que llevar a los niños al cole o al médico, lo pudieras hacer. Que si debías de acudir al médico de la lado de casa al mediodía, esa mañana la pudieras trabajar desde casa. Quien no quisiera que no se pasara por la oficina mas que lo imprescindible. En cambio parece que la idea es que todos nos volvamos autónomos, emprendedores que le llama don Mariano. Habrá quien lo lleve bien, actores, artistas, comunities managers e incluso el gran Francisco Ibañez son autónomos y lo llevan bien, pero una sociedad de autónomos pinta que acabará convirtiéndose en una sociedad de deprimidos y quemados, mas que nada porque no todos pueden lograr todos los objetivos. Puede que incluso desaparezca la Seguridad Social, total, nadie tendrá tiempo de ponerse enfermo. Adiós a las pensiones. Hola cursos de automotivación, coaching y filosofía barata soltada por otro autónomo, que estará sudando la gota gorda para que lo vuelvan a contratar.
Exagero, lo se, y quizá las circunstancias, la robótica, nos obliga a ir hacia la autonomía personal total, y tiene ventajas, pero también un montón de cosas malas que no se si tenemos claras. ¿Seguro qué esto es el trabajo del futuro? Pensadlo antes de lanzaros a la piscina.
Llevo ya un tiempo siguiendo a unos cuantos youtubers.Sí, estos chavales que se graban delante de una cámara, tienen millones de visitas e incluso algunos se ganan bien la vida con ello. Y sí, he decidido poner chavales porque aún no he encontrado a nadie mas viejo que yo vloggeando, y seguro que alguno ha de haber.
De tipos de youtubers hay de todo, como en botica, pero el funcionamiento básico de lo que hacen todos es bastante común. Uno tiene algo que explicar, un hobby, una habilidad, una idea, planifica lo que va a decir, lo graba en cualquier lugar y lo sube a YouTube. Le dan clic al botón de monetizar el vídeo y por cada cierto número de visionados reciben cierto dinero. Vamos que a todas luces es un trabajo. Hay una buena parte de ellos que os dirán que lo hacer por hobby, que no es un trabajo, pero eso es porque no reciben el suficiente dinero como para dedicarse exclusivamente a eso, pero en cualquiera de los casos son personas totalmente autónomas. Autónomas en los dos sentidos de la palabra, que ellos se lo guisan y se lo comen, y que es su tipo de régimen laboral. Raro es el que trabaja por cuenta ajena.
No suelo interactuar con ellos pero el otro día una booktuber (alguien que hace vídeos hablando de libros) decidió que la gente le podíamos preguntar lo que quisiéramos, que contestaría, y lo hice. La pregunta era de aquellas con semilla de respuesta, puesto que ya sabía que me respondería. Le pregunté cuantos libros lee por semana para poder hacer un vídeo cada semana. La respuesta fue uno cada tres días aproximadamente, que lee a todas horas. A mi me duran meses, así que a mi no me cundiría, pero a parte de que soy lento leyendo, ¿veis a donde quiero llegar?
Tomando como ejemplo esta buena mujer que lee libros, se ve obligada a un cierto ritmo de lectura, para poder hacer un vídeo cada cierto tiempo, para poder ganar dinero por ello. Si un día no lee, no hay vídeo, luego no hay dinero. Se ha vuelto esclava de si misma. No se cual es la realidad de su caso, quizá su fuente de ingresos es otra, pero podéis aplicar este esquema cualquier youtuber que conozcáis. Desde los que viven de jugar a vídeo-juegos, a los que cantan, a los que gastan bromas, a los que hablan de cine, filosofía, ciencia, misterio, punto de cruz, manualidades, incluso esos niños que solo se dedican a jugar y que tienen a mi sobrina grande enganchada. Aunque también está enganchada a Ricky Martin.
A lo que iba, cuando nos vendieron que el futuro era el trabajar desde casa, la deslocalización, la flexibilidad de horarios, no era esto. Se trataba de que si tenías que llevar a los niños al cole o al médico, lo pudieras hacer. Que si debías de acudir al médico de la lado de casa al mediodía, esa mañana la pudieras trabajar desde casa. Quien no quisiera que no se pasara por la oficina mas que lo imprescindible. En cambio parece que la idea es que todos nos volvamos autónomos, emprendedores que le llama don Mariano. Habrá quien lo lleve bien, actores, artistas, comunities managers e incluso el gran Francisco Ibañez son autónomos y lo llevan bien, pero una sociedad de autónomos pinta que acabará convirtiéndose en una sociedad de deprimidos y quemados, mas que nada porque no todos pueden lograr todos los objetivos. Puede que incluso desaparezca la Seguridad Social, total, nadie tendrá tiempo de ponerse enfermo. Adiós a las pensiones. Hola cursos de automotivación, coaching y filosofía barata soltada por otro autónomo, que estará sudando la gota gorda para que lo vuelvan a contratar.
Exagero, lo se, y quizá las circunstancias, la robótica, nos obliga a ir hacia la autonomía personal total, y tiene ventajas, pero también un montón de cosas malas que no se si tenemos claras. ¿Seguro qué esto es el trabajo del futuro? Pensadlo antes de lanzaros a la piscina.
Autor:
/negativespace.co
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