Confinados (13)
Hola,
Parafraseando a Golpes bajos "No mires a los ojos de la gente. Me dan miedo, mienten siempre. No salgas a la calle cuando hay gente." Y continuo con no salgas sin mascarilla, no tosas, no estornudes, no salgas sin guantes, mantén las distancias, habla a distancia, mejor por móvil, no le des un beso, ni dos, no le estreches la mano, no te metas en la piscina, no subas al coche, no te cojas de la barra del bus, ni del metro, déjalo pasar que el siguiente vendrá mas vacío. No cojas patatas del plato de enfrente, no comas con cubiertos si no vienen en su bolsa cerrada y son deshechables, no pagues con dinero, no toques el dibujo de ese niño, no pases la mano por el mueble, barre con mascarilla, corre a favor de viento, no vayas al fútbol, ni al basquet, nada de jugar un 3 contra 3 en la calle. Los pupitres separados, las clases por vídeo conferencia, no juegues al golf con conocidos, no te acerques a ese que no lleva el chip de sanidad, no te acerques que lo lleva pero dice que su prima la del pueblo lo pasó, adjunte un certificado de sanidad con el currículum, no entres en ese bar que no hay mamparas, mejor fuera que dentro hay aire acondicionado, teletrabaja, no entres en la tienda si hay alguien, no te pruebes ropa en la misma tienda,...
Estamos en medio de una pandemia y tenemos que observar unas normas para evitar que el virus se propague. No es por la propagación es sí, es para que no lo pillemos todas a la vez. Como no hay protección para no infectarte, has de ponerte protección para no infectar y lavarte mucho las manos y no tocarte las mucosas si no están limpias. Vale. A todo esto le añadimos un montón de normas imbéciles que todos los gobiernos del mundo imponen. Vale. Pero hablan que cuando el riesgo disminuya dicen que volveremos a la normalidad o a la nueva normalidad. ¿De verdad queremos?
Volver a la normalidad es volver a lo que ha causado todo esto. Dejando a un lado las malas gestiones de la pandemia por los gobiernos, pero no la han visto venir, no estamos preparados para grandes catástrofes, no tenemos planes de emergencia, no tenemos ahorros, hemos demostrado que muchos negocios viven de prestado, que compramos cosas fuera que podríamos hacer nosotros mismos, que mal pagamos a los trabajos esenciales, que hacemos leyes solo para los que tienen dinero, que los políticos siguen pensando que no trabajan para nosotros,... ¿queremos volver?
Volver a la nueva normalidad, como lo expresan algunos, es volver con alguna de las cosas que he mencionado antes. No todas, pero algunas o mas bien muchas de ellas se colaran. Y ¿queremos? ¿Queremos vivir en una distopía como Demolition man (1993) o Gattacca (1997) donde la gente ya no se besa, no se toca, el sexo se hace por máquinas, se crean clases por la genética,...?
Pues cuidado que decidimos ahora cuando la situación se normalice, sigamos sin vacuna ni medicación paliativa, y se nos quieran imponer reglas de sanitarias por nuestro bien. Nos puede quedar una distopia que ni los mejores autores imaginaron.
Parafraseando a Golpes bajos "No mires a los ojos de la gente. Me dan miedo, mienten siempre. No salgas a la calle cuando hay gente." Y continuo con no salgas sin mascarilla, no tosas, no estornudes, no salgas sin guantes, mantén las distancias, habla a distancia, mejor por móvil, no le des un beso, ni dos, no le estreches la mano, no te metas en la piscina, no subas al coche, no te cojas de la barra del bus, ni del metro, déjalo pasar que el siguiente vendrá mas vacío. No cojas patatas del plato de enfrente, no comas con cubiertos si no vienen en su bolsa cerrada y son deshechables, no pagues con dinero, no toques el dibujo de ese niño, no pases la mano por el mueble, barre con mascarilla, corre a favor de viento, no vayas al fútbol, ni al basquet, nada de jugar un 3 contra 3 en la calle. Los pupitres separados, las clases por vídeo conferencia, no juegues al golf con conocidos, no te acerques a ese que no lleva el chip de sanidad, no te acerques que lo lleva pero dice que su prima la del pueblo lo pasó, adjunte un certificado de sanidad con el currículum, no entres en ese bar que no hay mamparas, mejor fuera que dentro hay aire acondicionado, teletrabaja, no entres en la tienda si hay alguien, no te pruebes ropa en la misma tienda,...
Estamos en medio de una pandemia y tenemos que observar unas normas para evitar que el virus se propague. No es por la propagación es sí, es para que no lo pillemos todas a la vez. Como no hay protección para no infectarte, has de ponerte protección para no infectar y lavarte mucho las manos y no tocarte las mucosas si no están limpias. Vale. A todo esto le añadimos un montón de normas imbéciles que todos los gobiernos del mundo imponen. Vale. Pero hablan que cuando el riesgo disminuya dicen que volveremos a la normalidad o a la nueva normalidad. ¿De verdad queremos?
Volver a la normalidad es volver a lo que ha causado todo esto. Dejando a un lado las malas gestiones de la pandemia por los gobiernos, pero no la han visto venir, no estamos preparados para grandes catástrofes, no tenemos planes de emergencia, no tenemos ahorros, hemos demostrado que muchos negocios viven de prestado, que compramos cosas fuera que podríamos hacer nosotros mismos, que mal pagamos a los trabajos esenciales, que hacemos leyes solo para los que tienen dinero, que los políticos siguen pensando que no trabajan para nosotros,... ¿queremos volver?
Volver a la nueva normalidad, como lo expresan algunos, es volver con alguna de las cosas que he mencionado antes. No todas, pero algunas o mas bien muchas de ellas se colaran. Y ¿queremos? ¿Queremos vivir en una distopía como Demolition man (1993) o Gattacca (1997) donde la gente ya no se besa, no se toca, el sexo se hace por máquinas, se crean clases por la genética,...?
Pues cuidado que decidimos ahora cuando la situación se normalice, sigamos sin vacuna ni medicación paliativa, y se nos quieran imponer reglas de sanitarias por nuestro bien. Nos puede quedar una distopia que ni los mejores autores imaginaron.
Autor: Tim Mossholder
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