El niño del vudú

Hola,

Lo que sucede cada vez que Enric se marcha de vacaciones es digno de estudio. Cualquiera puede ser mal pensado la primera vez, la segunda, la tercera,... pero si cada ocho de diez veces que se va de vacaciones algo se rompe el mal pensar queda excluido. Conociéndolo queda excluido. A eso le añadimos que lo que se rompe no es fácil de romper, y muchas veces ajeno a nosotros, solo le veo dos opciones.
Opción uno: Enric es el centro de la empresa, un ser todopoderoso que con su sola ausencia, se crea un vacío en orden del espacio tiempo, que hace que los males nos sobrevengan.
Opción dos: Mi preferida. Nos han hecho vudú, mal de ojo, mal fario, llamadlo como queráis, incluso puede haber sido el propio Enric, que prohíben que se tome vacaciones, o que siempre le encontremos en falta. O va dirigido a mi, que me hago cargo de la cosa durante su ausencia.
Sea como sea mañana me llevo a Hendrix cantando su voodoo child, y cantaré a grito pelado eso de "...porque soy el niño del vudú. Baby, el señor sabe que soy el niño del vudú...". A ver si exhortizamos el lugar.