Sin el jefe de la manada
Hola,
Siempre he oído hablar de la vida de los perros tanto en el sentido bueno, como en el malo. El chucho que conozco mas de cerca es Stitch, el perro de mi hermana. Stitch cuando esta en casa de mis padres, sigue a mi padre a todas partes, como si fuera el jefe de la manada a seguir. Ayer mi padre se puso malo y ha vuelto al hospital.
Él andaba por ahí cuando nos marchamos con mi padre y ya vio que algo iba bien, que el jefe de la manada se iba a marchar como hace unos meses, pero a parte de seguirle a todas partes no entendía nada. No es que no sepa reconocer a alguien enfermo, al contrario, cuando yo he estado en casa de mis padres, en cama, él dejó de seguir al jefe de la mana y se estiró a mi lado. Ayer y hoy cuando llega a casa de mis padres lo primero que hace es buscar al jefe de la manada en los lugares comunes, la habitación del ordenador, el comedor o el balcón. Como no le encuentra se dirige a su habitación, se va al lado de la cama de mi padre y se estira encima de sus zapatillas. Algo así como, por aquí pasa fijo. Solo para mear y comer abandona la búsqueda.
Ya puedes ponerte frente a él y el explicarle que su jefe no está, que pondrá esa cara que a todos los humanos nos encanta que dice - te he entendido - pero no es así. No puedes decirle que solo es una infección y que pronto volverá. Él solo sabe, que por una razón que no alcanza a entender, el jefe no está y su tristeza aumenta. Así que no creo que la vida de perro sea una vida fácil, ya que hay demasiadas cosas que no entiendes y normalmente lo que no entiendes te hace sufrir.
Siempre he oído hablar de la vida de los perros tanto en el sentido bueno, como en el malo. El chucho que conozco mas de cerca es Stitch, el perro de mi hermana. Stitch cuando esta en casa de mis padres, sigue a mi padre a todas partes, como si fuera el jefe de la manada a seguir. Ayer mi padre se puso malo y ha vuelto al hospital.
Él andaba por ahí cuando nos marchamos con mi padre y ya vio que algo iba bien, que el jefe de la manada se iba a marchar como hace unos meses, pero a parte de seguirle a todas partes no entendía nada. No es que no sepa reconocer a alguien enfermo, al contrario, cuando yo he estado en casa de mis padres, en cama, él dejó de seguir al jefe de la mana y se estiró a mi lado. Ayer y hoy cuando llega a casa de mis padres lo primero que hace es buscar al jefe de la manada en los lugares comunes, la habitación del ordenador, el comedor o el balcón. Como no le encuentra se dirige a su habitación, se va al lado de la cama de mi padre y se estira encima de sus zapatillas. Algo así como, por aquí pasa fijo. Solo para mear y comer abandona la búsqueda.
Ya puedes ponerte frente a él y el explicarle que su jefe no está, que pondrá esa cara que a todos los humanos nos encanta que dice - te he entendido - pero no es así. No puedes decirle que solo es una infección y que pronto volverá. Él solo sabe, que por una razón que no alcanza a entender, el jefe no está y su tristeza aumenta. Así que no creo que la vida de perro sea una vida fácil, ya que hay demasiadas cosas que no entiendes y normalmente lo que no entiendes te hace sufrir.
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