Apretando el acelerador

¿Cómo va todo? Aunque tú, desde allá donde estés ahora mismo, ya debes estar al tanto de todo voy a intentar ponerte al día de lo que hemos pasado este año.
La mama no está mal pero tampoco está bien. Le duele todo la mayoría del tiempo, dicen que es cosa de la artrosis, la misma que hace que le cueste respirar.  Ella que no puede estarse quieta, que odia quedarse encerrada en casa, sale lo justo y necesario para comprar y el resto del tiempo se lo pasa en casa. Los médicos simplemente le dicen aquello de que no se puede hacer nada, excepto tomarse algo para que los dolores duelan menos.
Tu hija sigue como últimamente, cualquier cosa la enfada, cualquier cosa la hace saltar, cualquier cosa le preocupa. Tiene esa sensación de que ha hecho todo bien y aun así está perdiendo y no sabe por qué. Parte de que todo lo ha hecho bien hasta ahora son tus dos geniales nietas.
La mayor saca notas impresionantes, estás metida en todo lo que se puede involucrar y baila como nunca encima de los escenarios. ¿Tiene defectos? Sí, claro que sí, pero ojalá todos los que llegue a tener sean los que ya tiene.
La pequeña también saca notas impresionantes, y mas sabiendo los esfuerzos que ha de hacer, con sus diez años, para adaptarse a un mundo diseñado en su contra. Eso mismo hace que, a veces, sea complicado tratar con ella y que se involucre en pocas cosas, pero cuando aprenda a jugar con las cartas que tiene, su único límite será aquello que le venga de gusto hacer.
Yo estoy a punto de perder el trabajo. Si nada cambia esto sucederá entre enero y febrero del año que viene. Los que han hundido la empresa se saldrán con la suya, sin consecuencias, y yo tendré que buscarme una nueva vida. Llevo meses a la espera de que todo reviente, y entonces decidir por donde salir. Tener cincuenta años, la inteligencia artificial,… nada me lo va a poner fácil.
El Sants mal. Ahora juegan de pena, aunque no pierden demasiado. Perdimos otra categoría, ahora estamos en lo que viene a ser la segunda regional de antes, y todo pinta que nos vamos a pasar en esta unas temporadas.
Tanto tu casa como el barrio empezarías a no reconocerlos, y eso que solo hace tres años que te fuiste. Parece que este año que se acaba los cambios han apretado el acelerador.
Espero que todo te vaya bien y, si tienes un rato, no dudes en hacernos una visita para explicarnos como te va. Da recuerdos, y por mucho que te queramos, intentaremos que sea mas tarde que pronto el ir a visitarte allá a donde ahora estás.

Foto generada por Grok